martes, 29 de noviembre de 2011

LOS CONOS DE LIMA SON LOS MÁS VULNERABLES ANTE UN TERREMOTO



Les faltan vías de acceso y hospitales adecuados para atención masiva.
Según expertos, limeños deben estar listos para un sismo como el de Pisco.

Por: Carmen Gallegos
Martes 29 de Noviembre del 2011

Viernes 28 de octubre de 1746. Hora: 10:30 p.m. Una Lima amurallada de tan solo 60.000 habitantes y 3.000 casas es sacudida por un feroz terremoto. Al amanecer del sábado, los limeños contemplan una ciudad con tan solo 25 casas en pie. Recién entonces empiezan a llegar las noticias del Callao, arrasado por un tsunami, donde solo sobrevivieron 200 de sus 5.000 habitantes.

De acuerdo con el investigador Hernando Tavera, director de Sismología del Instituto Geofísico del Perú (IGP), se trató de un terremoto similar al de Chile o Japón, de unos 9 magnitud momento (Mw).

¿265 años después, Lima está preparada para afrontar un terremoto así?
En el terremoto de 1746 perecieron 3.000 personas, es decir el 4,8% de la población. “Si trasladamos ese porcentaje a la Lima actual, ese porcentaje equivaldría a más de 500.000 víctimas”.

TERREMOTO MÁS PROBABLE
¿Pero un movimiento sísmico tan fuerte podría volver a sacudir Lima? Según el IGP, el terremoto más probable que podría ocurrir en la ciudad es de 8 Mw, similar al que azotó Pisco en el 2007, con epicentro en el mar frente al Callao. A este le seguiría un maremoto, 20 minutos después, con olas de 7 metros de alto.

“Según nuestros estudios de los últimos terremotos ocurridos en Lima, hay una alta probabilidad, debido al silencio sísmico, de que un terremoto así ocurra próximamente”, asegura Tavera.

Tomando como referencia estas características, Indeci elaboró un Sistema de Información de Recursos para la Atención de Desastres para Lima Metropolitana y la Región del Callao (Sirad) con apoyo de Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y fondos de la Dirección General de Ayuda Humanitaria y Protección Civil de la Comisión Europea (DG ECHO).

Los resultados del Sirad, publicado en mayo del 2011, muestran las fortalezas y debilidades de la ciudad para afrontar un fenómeno así. Se calcula que, en un terremoto como ese habría más de 200.000 viviendas destruidas y cerca de 350.000 inhabitables, con lo cual las autoridades tendrían que albergar a más de tres millones de personas. Además, en toda la ciudad se generarían problemas de accesibilidad y movilidad donde el cono este y San Juan de Lurigancho destacan como las zonas más vulnerables.

OPINIONES
Los terremotos no matan personas. Lo que mata personas son las estructuras que colapsan y la falta de preparación y educación de las personas.

Debemos estar preparados para un terremoto como el de 1746, el mayor ocurrido en Lima.

Fuente: EL COMERCIO